Me llamo Juan Carlos Cabral, nací en Jerez de la Frontera, y soy fotógrafo.
Una tarde, cuando era un niño de unos diez años, rebuscando en casa de la abuela, en la gaveta de una cómoda antigua encontré una vieja fotografía en blanco y negro.
En ella, un hombre trajeado, aún joven, de semblante serio y tranquilo, estaba sentado en una silla con las piernas cruzadas, una revista entre las manos, levantaba el rostro para mirarme fijamente. Yo no podía apartar los ojos de aquella mirada vagamente familiar, que sin embargo no recordaba haber visto antes. Me atreví a coger la fotografía y llevársela a mi padre. Él la miró brevemente, y me dijo:
– “Es tu abuelo”.
Mi abuelo nos dejó cuando yo tenía siete años, y casi no tengo recuerdos de él, apenas la imagen de un anciano con su bastón, sentado en un sillón junto a la puerta de la cocina. Lo demás son anécdotas contadas por mi padre y sus hermanos.
Sin embargo, allí estaba él, joven, tranquilo y seguro, mirándome directamente a los ojos a través del tiempo y de la muerte. Fue la primera vez que sentí el poder de una fotografía. Después ha habido muchas más.
Mi primera cámara fue una Yashica telemétrica, que arrebaté a mi padre cuando tenía trece años. Después, con dieciséis, me compré mi primera cámara réflex, también una Yashica, que pagué a plazos.
Sin embargo, por esas cosas de la vida no estudié Fotografía, sino Topografía, y trabajé en esta profesión durante años. Me levantaba temprano, conducía muchos kilómetros hasta la obra de turno, y pasaba el día mirando por el visor de un aparato muy parecido a una cámara, trasladando la realidad al papel.
Tardé tiempo en darme cuenta de la ironía de la situación, pero cuando al fin lo hice, hace ya años, no tuve más remedio que dejar los instrumentos de topógrafo, estudiar Fotografía, y convertirme finalmente en fotógrafo profesional.
“Fotografía” significa “escrito con luz” … La cámara fotográfica tiene un modo especial de mirar: no abarca todo el rango de luminosidad que percibe el ojo humano, ni tiene la misma capacidad de enfoque. Pero esas limitaciones la convierten, en las manos adecuadas, en un artefacto de alquimista que transforma los momentos en memoria, preservando la pequeña parte de eternidad que hay en cada instante.
Mis especialidades son el retrato y los eventos sociales: fotos de familia, bodas, comuniones, sesiones de boudoir. Me formé con grandes profesionales, y tengo una larga trayectoria de clientes satisfechos, algunos ya amigos. Pero prefiero que me contraten por algo más que por ser eficaz. Me gusta la gente, no lo puedo evitar, y cuando te fotografío, quiero devolverte algo más de lo que cualquiera puede ver.
Estoy loco por la luz, por los recuerdos, por la vida. Estas son algunas de mis fotografías: bienvenido a mi locura…
Mucho antes del descubrimiento de América, antes de que la Aldea del Rocío fuera como la conocemos, previo a que el culto mariano existiese.Boda bajo árbol Boda civil
La sombra ha contemplado multitud de acontecimientos, terremotos, sequías, incendios, luchas, guerras…
Llegando a nuestros días, nuestro ajetreo cotidiano de esta sociedad del siglo XXI. Que nos hace vivir muy deprisa.
La sombra de un gran árbol, un acebuche que fue testigo y actor principal de una ceremonia llena de lágrimas, risas, música, relinchos y amor.
Bajo su sombra se celebró el acto. Su figura daba etiqueta a este enlace, no se me ocurre un altar mejor, no me extraña que en ciertas civilizaciones se tenga culto a estas maravillas de la naturaleza.
Nos hacemos fotos para, de alguna manera perdurar, bastará que alguien recuerde ese día al ver las imágenes en el álbum. Y la historia que cuentan, la del día de la boda de Irene y Santi reviva en sus memorias.
Se trata de dejar un legado para Carlota, Paola y la dormida Claudia, y que no tengan sombras en sus recuerdos.
Yendo aún más lejos para gente que aún no ha nacido, sin atreverme a pedir que duren seiscientos años, los recuerdos se entiende.
Irene -Querido Juan Carlos
Ya han pasado unos meses de este día que tan bonito has descrito, gracias, en el que que tuvimos la suerte de contar contigo para el día de nuestra boda.
Quiero de corazón agradecerte tu entusiasmo, tus ganas, tu búsqueda de perspectivas…. Estabas ahí atento a cada guiño, queriendo hacerlo todo sencillo y ayudándonos a mostrarnos tal y como somos, mas allá de los nervios y de las emociones lógicas en un día tan intenso.
Las primeras imágenes que enseñaste me hicieron llorar enseguida. Me alegro mucho de haberte tenido al lado añadiéndole valor a la experiencia misma.
También queremos agradecerte habernos hecho sentir que te inspirabamos, que te inspiraba nuestra boda, nuestro árbol, nuestros sentires a ese son que se bailaba aquel día en la marisma del Rocio.
Tus fotos son de esas que cuentan la historia, que muestran lo vivido. Fotos nuestras, fotos de los otros, fotos de todos. Fotos de los detalles, de los minutos, de lo que ni vimos y estaba ahí y viste tu…
Fotos de los sentimientos…. Mucho mas difícil de ser fotografiados!!! …. Fotos reflejo de esa mirada atenta tuya todos esos instantes, sintiendo cosas y queriendo perpetuarlo todo en el recuerdo a través de tu entrañable, bello y especial trabajo.
Espero reencontrarnos pronto en el camino!!!! Un abrazo
"Reunir doce fotos buenas en un año es... " Fotos del año - […] […]
Irene - Querido Juan Carlos
Ya han pasado unos meses de este día que tan bonito has descrito, gracias, en el que que tuvimos la suerte de contar contigo para el día de nuestra boda.
Quiero de corazón agradecerte tu entusiasmo, tus ganas, tu búsqueda de perspectivas…. Estabas ahí atento a cada guiño, queriendo hacerlo todo sencillo y ayudándonos a mostrarnos tal y como somos, mas allá de los nervios y de las emociones lógicas en un día tan intenso.
Las primeras imágenes que enseñaste me hicieron llorar enseguida. Me alegro mucho de haberte tenido al lado añadiéndole valor a la experiencia misma.
También queremos agradecerte habernos hecho sentir que te inspirabamos, que te inspiraba nuestra boda, nuestro árbol, nuestros sentires a ese son que se bailaba aquel día en la marisma del Rocio.
Tus fotos son de esas que cuentan la historia, que muestran lo vivido. Fotos nuestras, fotos de los otros, fotos de todos. Fotos de los detalles, de los minutos, de lo que ni vimos y estaba ahí y viste tu…
Fotos de los sentimientos…. Mucho mas difícil de ser fotografiados!!! …. Fotos reflejo de esa mirada atenta tuya todos esos instantes, sintiendo cosas y queriendo perpetuarlo todo en el recuerdo a través de tu entrañable, bello y especial trabajo.
Espero reencontrarnos pronto en el camino!!!! Un abrazo